Los plásticos financieros son una herramienta fundamental en la vida cotidiana de la mayoría de la población, gracias a que agilizan la operatoria al momento de comprar algún bien o servicio y evita el manejo de dinero cash o efectivo.
Sin embargo, no siempre es tan fácilmente acceder a ellas e, incluso, muchas personas tienen problemas para administrarlas correctamente.
En la siguiente guía te contamos específicamente qué sucede con las tarjetas de débito y el buró de crédito.
¿Puedo sacar una Tarjeta de Débito si estoy en Buró?
La respuesta inmediata es SI. Esto es posible ya que las entidades financieras no suelen revisar el Buró de Crédito como si sucede en el caso de una solicitud de tarjeta de crédito.
Sin embargo, esto varía según las políticas propias de cada banco o cooperativa. En algunas instituciones suelen pedir información que sustituye el informe crediticio.
Por ley, lo único establecido según una regulación del Banco de México es que si el Buró de Crédito de una persona refleja un retraso en la cancelación de una deuda por un período mayor a 60 días del vencimiento y por un valor igual o superior a 500 UDIS (aproximadamente $2.500 pesos) ésta no podrá acceder a una tarjeta crediticia.
Para conocer más sobre los requisitos y pasos a seguir para abrir una cuenta bancaria estando en Buró te recomendamos leer la guía que se en cuenta en la siguiente liga.
¿Qué diferencia hay entre la tarjeta de débito y la de crédito?
Si bien en líneas generales suele conocerse la existencia de ambos tipos de tarjeta de forma complementaria, puede que aún no sepas cuál es la verdadera diferencia entre una y otra.
Lo primero que debemos destacar es que la tarjeta de débito siempre se encuentra asociada a una cuenta bancaria o de cooperativa. Es utilizada como medio de pago instantáneo o para extraer dinero en efectivo de cajeros utilizando como base la plata que se tiene disponible al momento de la acción.
En contraposición, la tarjeta de crédito es un herramienta financiera que permite hacer pagos a futuro fundamentándose sobre una línea crédito pre-autorizada.
La principal diferencia es que en el caso de los plásticos de crédito los consumos se acumulan durante el mes y al cierre deberás decidir si abonas el total de lo consumido o utilizas el crédito para financiarlo en un periodo mayor .
Ten en cuenta que las tarjetas de crédito NO son un ingreso adicional, sino una alternativa segura y cómoda de administrar tus gastos en el tiempo.
Y el uso de su financiación implica un costo adicional por intereses.